[Marzo, 2019] Constructora Rencoret marca la diferencia en el rubro incorporando a la mujer en gran parte de sus áreas de trabajo
Hoy, más de cuarenta mujeres integran esta empresa, asumiendo diversos roles y labores, tanto en las obras como en la oficina central. Sus competencias, fortalezas y habilidades las han hecho acreedoras de cargos que históricamente en este rubro, eran ocupados solo por hombres. La empresa familiar Constructora Rencoret, se distingue en el rubro, abriendo sus puertas al liderazgo femenino, brindándole la confianza y la oportunidad, en sus diferentes líneas de trabajo.
La inserción laboral de la mujer en los distintos sectores productivos de nuestro país, sin duda, se ha dado de manera gradual en este último tiempo. Más aún tratándose de áreas como la minería y la construcción, ámbitos donde los puestos de trabajo han sido ocupados exclusivamente por los hombres, a excepción de cargos como secretaria, servicio de aseo y una que otra labor administrativa.
El mundo está cambiando y, en particular, hoy, valorar y reconocer el aporte de la mujer, ya sea, profesionalmente o en los múltiples oficios de la industria de la construcción, es una realidad que se condice con la filosofía empresarial de Constructora Rencoret. Incorporar laboralmente a la mujer, valorando su experiencia, sus competencias profesionales y técnicas y reconociendo sus virtudes y fortalezas, como la empatía, responsabilidad, orden, disciplina y sensibilidad, es lo que ha primado en esta empresa regional al momento de optar por la contratación femenina.
El gerente general de Constructora Rencoret, Raimundo Rencoret Ríos, señala al respecto “esta es una empresa familiar, de manera que nuestra visión respecto a la mujer tiene un prisma distinto a otras empresas del rubro. Su responsabilidad frente a los desafíos, su profundo compromiso en todos los ámbitos y ese espíritu maternal tan propio de ellas, permiten que el ambiente laboral sea mucho más grato y cálido, lo que da un sello especial a nuestra organización. Nuestra empresa tiene treinta y dos años de existencia en la zona y desde entonces la experiencia de trabajar con mujeres siempre ha sido extraordinaria”.
Por su parte, el gerente de administración y finanzas, Manuel José Rencoret, también valora que gran parte del equipo de trabajo esté compuesto por mujeres. “Además de sus competencias técnicas, son un gran aporte para la empresa en términos de respeto, paciencia, prolijidad y compromiso. Hemos visto que gracias a una mayor presencia femenina en nuestras faenas se han mejorado cosas básicas como, por ejemplo, la limpieza e incluso, el vocabulario, aspectos que finalmente contribuyen a mejorar el clima laboral y por ende la productividad“.
ADMINISTRADORAS DE OBRAS
Hasta hace un tiempo, la administración de una obra, era un cargo mandatado solo por hombres, pues Constructora Rencoret ha revertido este paradigma incorporando en esta labor a dos mujeres profesionales y con vasta experiencia.
Marlene Werner es constructora civil de la ULS y cuenta con veinticinco años de experiencia en el rubro. Ingresó hace diez meses a Constructora Rencoret, asumiendo por primera vez el cargo de administradora de obra, labor que ejerce en la obra Polideportivo Las Compañías, en La Serena. “Cuando recién partí trabajando quería estar en terreno, pero mis antiguos jefes me decían que no, porque podía ser un elemento distractor para los trabajadores ¡imagínate! Trabajé entonces en evaluación de proyectos, en oficina técnica, como jefa de terreno y ahora como administradora de obra. Esos son los pasos que he debido seguir para llegar a este puesto, situación que no ocurre con los hombres, por eso agradezco la oportunidad que me ha dado Constructora Rencoret”, comenta Marlene Werner.
De las cualidades que se requieren para asumir este cargo, la profesional destaca “para ser administrador de obra, los requerimientos son los básicos, pero en el caso de la mujer, creo que tenemos una mayor capacidad de realizar varias cosas a la vez, de observar con mayor agudeza, de controlar y de organizar con disciplina una serie de acciones. En mi caso, no tranzo, soy muy directa y firme, de manera que nunca he sentido que por el hecho de ser mujer, no se respeten las instrucciones o las normas, siempre he recibido el apoyo y el respeto de mis trabajadores”, recalca Marlene y agrega que faltando casi tres meses para concluir esta obra se siente orgullosa de liderar este proyecto y de la labor realizada por todo su equipo de trabajo.
Marcela Videla es ingeniera constructora de la ULS, hace dos años ingresó a la empresa y su cargo es el de administradora de obra del Edificio San Lorenzo, ubicado en el centro de La Serena. “Que la empresa me de esta oportunidad es un reconocimiento personal y profesional, porque aún veo que en otras empresas siguen contratando a hombres para este puesto. Ahora, es importante destacar que con la presencia femenina en una obra, el ambiente laboral es distinto, hoy, existe mucho respeto hacia la mujer. Agradezco la confianza, el trato y el valor que me da la empresa y los trabajadores de esta obra”, afirma Marcela Videla.
Respecto a la experiencia de contar con el liderazgo femenino en cada uno de los proyectos que realiza la constructora, el gerente de proyectos, Sergio Cabellos destaca “en lo personal, ha sido un verdadero desafío, ya que en poco tiempo se ha demostrado que las competencias técnicas y profesionales, no son exclusivas del género masculino. Las mujeres de nuestro equipo de trabajo son esforzadas, detallistas, ordenadas, metódicas y exigentes al minuto de cumplir con sus objetivos. En definitiva, son un gran aporte para la empresa”.
EN OFICINA Y EN TERRENO
La constructora civil, Gabriela Becker, ejerce hace cinco años el cargo de jefa de calidad de la empresa, de manera que tiene a su cargo las tres obras que actualmente ejecuta la constructora. Su experiencia laboral anterior fue en el rubro de la minería y en ese entonces era la única mujer que trabajaba en terreno. “Cuando llegué a la constructora me encontré con varias mujeres así que se me hizo más fácil y llevadero, además los trabajadores siempre han sido muy respetuosos. Desde que estoy acá, nunca he tenido inconvenientes por el hecho de ser mujer y siento que tenemos el plus de ser más organizadas y ordenadas”, señala la profesional.
Coralia Cruz es ingeniera civil obras civiles, hace cuatro años ingresó a la constructora y es la encargada de calidad de la obra Edificio San Lorenzo. “La mujer es tan competente como el hombre y tenemos la facultad y habilidad para dirigir equipos numerosos, tanto en oficina como en terreno. Siento que estamos empoderadas asumiendo cargos ejecutivos y de manera proactiva, por otra parte, hoy, los colegas y los trabajadores respetan la jerarquía de la mujer y esa es una experiencia muy favorable, porque finalmente lo que importa es el resultado de todo el trabajo que realizamos en equipo”, enfatiza la ingeniera.
Yudith Araque ingresó hace dos años a la empresa como asistente y, hoy, es jefa de oficina técnica de la obra Punta Golf. Esta ingeniera en construcción de la ULS, afirma que ha tenido que aprender a fortalecer su carácter, pero no con la finalidad de igualarse al hombre, sino simplemente para imponer respeto. “Esto no significa que no lo haya, solo que es importante trabajarlo. Ahora, este cargo sí implica ser más fuerte porque estás rodeada de hombres. El orden y la rigurosidad es fundamental en esta labor y de por sí nosotras tenemos esas cualidades, factores que además son valorados por la empresa y eso ha permitido una mayor incorporación de la mujer en estos y otros cargos”, indica Yudith.
MANO FEMENINA EN LA SEGURIDAD
De los seis prevencionistas de riesgos que integran la empresa, cinco son mujeres. Una notoria preferencia femenina en este cargo, que refleja ciertas características naturales e intrínsecas de la mujer para cumplir cabalmente con un área tan importante en la industria de la construcción, como es la prevención y la seguridad laboral.
Ximena Reinoso, es jefa del departamento de prevención de riesgos de Constructora Rencoret, desde el 2014. Tiene a su cargo la responsabilidad de velar por la seguridad en todas las obras que ejecuta la empresa, una labor compleja y que requiere de la confianza y perseverancia de todo el equipo. “La fórmula es ser firme, pero siempre con respeto. El trato amable permite que la relación con los trabajadores sea positiva y que las instrucciones, por muy repetitivas que sean se tomen de la mejor forma. Las mujeres que asumimos esta labor somos muy detallistas, minuciosas, disciplinadas y empáticas, por esta razón, creo que la empresa valora aún más el desempeño de la mujer y nos ha ido incorporando en sus diferentes líneas de trabajo, marcando incluso un liderazgo en esta materia, respecto a otras empresas del sector”, destaca.
Miriam Caimanque es prevencionista de riesgos de la obra Edificio San Lorenzo, hace dos años que trabaja en la empresa y destaca que el ambiente laboral en las obras ha cambiado positivamente desde que la mujer se ha insertado en este rubro. “Hace ocho años cuando partí trabajando, el clima laboral era muy distinto. Hoy, las mujeres hemos aportado con el respeto mutuo en la relación de trabajo y siento que los trabajadores valoran nuestra presencia en las obras, nos ven como si fuésemos parte de sus familias, como una hermana o una hija. La verdad es que siempre nos entregan su mejor energía para trabajar en el día a día, acá no existe la mala onda y eso hace que este sea el mejor lugar para trabajar”, recalca.
Desde el 2015, Alejandrina Vilches, también se desempeña como prevencionista de riesgos en la empresa y actualmente, cumple esta labor en la obra Polideportivo Las Compañías. “Cuando estudiaba esta carrera sabía que esta profesión era ejercida mayoritariamente por hombres, pero cuando entré a Constructora Rencoret ya habían varias mujeres prevencionistas contratadas, lo que demuestra que la empresa hace un tiempo ya estaba cambiando esta figura. De nuestras fortalezas, en general, las mujeres somos detallistas, observadoras, responsables, ordenadas y tajantes. Además, en mi caso, tener como jefa a una mujer genera mayor empatía y confianza en el trabajo”, afirma.
ORDEN, DISCIPLINA Y PROACTIVIDAD
Estas son solo algunas de las fortalezas propias de la mujer que dan un sello particular a la gestión administrativa de Constructora Rencoret. Características que se destacan en la mujer con más años de permanencia en la empresa. Ella es Gladys Rojas, quien en 1989 ingresó a la constructora como secretaria administrativa y tiempo después se hizo cargo de las áreas de contabilidad y de recursos humanos de la empresa. Con el crecimiento y desarrollo de la constructora, se convirtió en la encargada de proveedores hasta que en el 2016, asumió como secretaria de gerencia. Testigo fiel de la incorporación laboral femenina durante todos estos años, Gladys Rojas, señala “actualmente somos cuarenta mujeres las que trabajamos en las diferentes empresas del holding y eso, en lo personal, es un gran orgullo porque nos hemos ganado un espacio gracias a nuestro desempeño y compromiso con el trabajo, incluso muchas veces combinando nuestras labores como madres y dueñas de casa. Agradezco a mi jefatura por brindarme estabilidad laboral durante todo este tiempo, por la confianza y por la oportunidad de ver como las nuevas generaciones, es decir, los hijos de mis jefes están ingresando a la empresa”, recalca con orgullo, Gladys Rojas.
La cara visible de la empresa y quien recibe diariamente con una sonrisa a todo el equipo de trabajo de la oficina central y a las visitas, es la secretaria recepcionista, Belén Seura, quien ingresó hace tres años a la empresa. “La mujeres tenemos un gran potencial y es espectacular ver como la empresa da la oportunidad para que podamos desarrollarnos profesionalmente. En la oficina central de la constructora, las mujeres somos mayoría y el ambiente laboral es muy agradable. En mi caso, siempre me gusta mantener el orden, la limpieza y tener una buena disposición. Creo que estas son características propias de la mujer y que se valoran en el ámbito laboral”, señala Belén Seura.
El área de Recursos Humanos de la empresa está integrada por cuatro mujeres y un hombre. Quien lidera este equipo hace siete años es la contadora auditora, Pilar Morales y junto a la administradora de empresas, Pamela Rojas, quien cumple la labor de encargada de recursos humanos, son las profesionales más conocidas por los trabajadores de las distintas obras en construcción que realiza la constructora. Y es que sus roles no solo se reducen a una intensa gestión en la oficina central, sino también a una activa labor en terreno. “En mi trabajo anterior sentí cierta discriminación por el hecho de ser mujer, pero cuando ingresé a Constructora Rencoret siempre fui bien aceptada por mis pares, por los administradores de obras y por los trabajadores. Por otra parte, aquí tenemos la libertad de seleccionar a las personas por sus competencias y no por el género. No existen instrucciones respecto a que un puesto deba ser ocupado necesariamente por el hombre, porque lo que se evalúa es el perfil, la experiencia y las características del cargo”, resalta Pilar Morales.
Pamela Rojas cumplirá cinco años en la empresa y afirma que el perfil de la mujer en el área de recursos humanos es fundamental dada la empatía y sensibilidad frente a las personas. “Las mujeres tenemos además, un valor agregado, somos muy minuciosas, planificadas y ordenadas. En lo personal, nunca he sentido discriminación por ser mujer, incluso en las obras donde existe mayor dotación masculina, el trato siempre ha sido cordial y de respeto. Hemos formado un excelente equipo humano y nos apoyamos entre todos”, agrega Pamela Rojas.
Solange Azúa ingresó a la empresa como estudiante en práctica y hace casi tres años fue contratada como administrativa de recursos humanos de SERVITEG, una de las empresas del holding. Esta ingeniera en administración de recursos humanos destaca “hoy, la mujer se ha empoderado en todas las áreas de trabajo y es bonito ver que la empresa en la medida que ha ido creciendo nos ha ido incorporando en sus distintos cargos. Tenemos una sensibilidad especial para enfrentar ciertas situaciones y a la vez podemos ser muy firmes, ambas cosas se fusionan muy bien en esta área de recursos humanos lo que claramente es beneficioso para la empresa”.
Milenka Calderón es ingeniera en gestión de recursos humamos y su cargo es administrativa de obra en Punta Golf. Hace seis años ingresó a la empresa y desde entonces ha sigo testigo de como ha aumentado la contratación de mujeres en distintos cargos. “Siento que nuestro gran aporte en el ámbito laboral ha sido generar un mayor respeto en el trato y hemos sido capaces de sensibilizar a los hombres, porque antes eran más machistas y siento que se han ido adaptando a estos cambios”, señala.
En definitiva, el espacio que hoy, tienen las mujeres en esta empresa ha sido el resultado de la oportunidad y de sus propios méritos. Un desempeño que refleja no solo las capacidades femeninas sino también sus grandes virtudes naturales, las que por cierto crecen con nuevas proyecciones y desafíos. Constructora Rencoret agradece a cada una de ellas el gran compromiso y aporte que entregan diariamente a la empresa, desde sus distintos puestos de trabajo.